Este es un caso inusual de carcinoma de cavum ya que, en principio, según el método de la localización del centro de la lesión, parecía más bien tener un origen en la cavidad nasal, puesto que el cavum no parecía estar muy afectado. Sin embargo el resultado fue el de carcinoma de nasofaringe.
Si el carcinoma nasofaríngeo se extiende a cavidad nasal puede extenderse a través del foramen esfenopalatino en la fosa pterigopalatina. Una vez en dicha fosa, vía retrógrada a lo largo del tronco de V2 y a través del foramen rotundum puede afectar al seno cavernoso y al cavum de Meckel.
Lo interesante de este caso es la inusual extensión hacia etmoides, órbita y seno maxilar. Obsérvese la proptosis del ojo derecho resultando en la exploración una parálisis del III par por la invasión del seno cavernoso.
Una muestra más de lo silente que puede llegar a ser una tumoración en nasofaringe.